Un viejo ya en las últimas llama a la enfermera que está a sus cuidados y le confiesa que le gustaría llevarse de recuerdo al otro lado un último momento de lujuria.
Cómo no, don Antonio, dice ella, espere un ratito que ya vuelvo.
El viejo, lleno de felicidad, espera pacientemente con una sonrisa calcada en la cara y la mirada lúbrica los veinte minutos que ella demora en regresar. De pronto, la puerta se abre y la enfermera ingresa envuelta apenas con una toalla. El viejo intenta incorporarse pero no lo consigue, entonces se resigna y espera que ella haga todo. Pero detrás de la enfermera aparece su novio sacándose el slip, enseguida ella deja caer la toalla y mirando al viejo baboso le pregunta:
¿Ya podemos empezar, don Antonio?
Fin.
EL ÚLTIMO RECUERDO 2 por Francisco A. Baldarena se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional.Basada en una obra en https://creativecommons.org/choose/?lang=es#metadata.
No hay comentarios:
Publicar un comentario